¿Meditas regularmente?
Desde el nivel básico se ha insistido en que los estudiantes deben dedicar tiempo a meditar al menos cinco minutos hasta un máximo de treinta.
Mi facilitador de la EUH explicó una vez que existía este malentendido en lo que respecta a la meditación. Porque se cree que para meditar hay que estar en un lugar perfecto. Es decir, se cree que debes estar en un escenario majestuoso como el Himalaya, un lugar tan especial con abundancia de pastos verdes, con los tonos de las campanas resonando de fondo en total silencio con la naturaleza. Se cree que sólo entonces puedes estar en tu meditación zen en armonía con el canto de los pájaros en el espacio abierto, eso hasta que un pájaro vuela demasiado cerca y deja caer caca en tu cabeza. Entonces en una fracción de segundo saltarás y maldecirás al pájaro por hacer lo que hace en su elemento natural. La cuestión es que no es necesario tener un lugar especial para meditar.
Ahora entendemos que la energía universal es dinámica. Lo que significa que durante el ruido y la actividad continua diaria de nuestras vidas, nuestra mente tiene que estar activa con nuestra aplicación. Porque es en este elemento donde vivimos diariamente y es ahí donde tenemos que aplicar y practicar constantemente para traer el cambio que beneficiará a toda la humanidad.
Tómate un tiempo para calmar tu alma. Mientras estás sentado en el coche esperando a que tus hijos salgan del colegio, mientras esperas a que la comida se cocine en el horno o en el trabajo tómate cinco o diez minutos para ir al baño a meditar. Nadie tiene que saber lo que estás haciendo. Tómate tiempo para meditar más de una vez durante el día. El mejor momento para meditar es por la mañana temprano, antes de empezar el día. Concéntrate en un punto mientras meditas con los ojos abiertos, no prestes atención al ruido exterior. En lo que tienes que centrarte es en el ruido que viene de tu interior. En el nivel básico aprendimos una técnica para eliminar todos los pensamientos y purificar la mente. Imagina la imagen del Maestro Luong Minh Dang dentro de ti, imagina su lunar en el lado derecho de tu cara, cada vez que surja un pensamiento utiliza tu técnica según tu nivel para purificar tu mente. Vacía tu copa.
Todos los niveles de la escuela de EUH tienen la técnica para purificar la mente, vaciar la y asi ayudar a que la aplicación sea más efectiva. Porque de qué vale tener la frecuencia y todo el conocimiento de la filosofía pero en el momento de la aplicación tu mente está llena de pensamientos, entonces por muy mucho que conozcas tu técnica en teoría no podrás ayudar a nadie, ni siquiera a ti mismo.
Así que tomemos tiempo para meditar diligentemente durante el día para que podamos hacer una diferencia en el bienestar de toda la humanidad.